Mes de Mayo, juramento de la Guardia Suiza Pontificia

El día del juramento es el punto culminante en la vida de cada guardia. Se jura sobre la bandera de la guardia con el uniforme de Gran Gala vistiendo la armadura (coraza), prometiendo fidelidad para toda la vida.

Como Ex Guardia Suizo nunca olvidaré mi experiencia en la Guardia Suiza Pontificia que fue para mi una escuela de vida en todos los sentidos. Con mucho gusto recuerdo el día del juramento el 6 de mayo en el lejano 1985.

Un juramento que presupone ante todo valentía y fidelidad. Un juramento, que también obliga a la completa devoción y lealtad.

Empezando con un poquito de historia me gustaría contarles de qué se trata realmente este famoso juramento de la Guardia Suiza.

El 6 de mayo de 1527, la Ciudad Eterna fue atacada por los mercenarios invasores de Carlos V. Hoy también hablamos del “saqueo de Roma»; adaptación al castellano de la voz italiana “Sacco di Roma”. Los suizos no tenían ninguna posibilidad de ganar en esta batalla, aunque intentaron desesperadamente ofrecer resistencia. Solo sobrevivieron 42 de los 189 guardias suizos, que en el último momento consiguieron poner a salvo al Papa Clemente VII en el castillo de Sant’Angelo a través del pasaje secreto, el llamado «Passetto».

La ceremonia anual del juramento de los nuevos reclutas todavía se lleva a cabo el 6 de mayo para conmemorar este evento histórico. Además de los familiares de los recién juramentados, también asisten al acto festivo altos representantes de la política y de la Iglesia.

Los reclutas repiten la fórmula leída por el capellán en forma abreviada:

«Juro servir fiel, lealmente y honorablemente al Sumo Pontífice Francisco y a sus legítimos sucesores, así como dedicarme a ellos con todas las fuerzas, sacrificando, si es necesario, mi vida por su defensa.

Asumo los mismos compromisos hacia el Colegio Cardenalicio durante la vacante de la Sede Apostólica. También prometo al Comandante y a los demás Superiores respeto, fidelidad y obediencia. Así que juro que Dios y nuestros Santos Patronos me asistan».

Leyendo esta formula del juramento de la Guardia Suiza, uno podría pensar que no tiene nada que ver con la vida cotidiana de un profesional de la seguridad.

Vemos que resalen palabras como:

“LEALTAD, HONESTIDAD, HONRADEZ, RESPETO Y OBEDIENCIA”.

Pensándolo bien, estas palabras, según yo, son importantes, cruciales para todo Oficial de Seguridad, en todos los niveles.

Claro el conocimiento, la capacitación, la mejora continua para mencionar algunos términos, son importantes también. Pero sin las expresiones evidenciadas, finalmente no se puede trabajar eficazmente.

Este año juraron 34 nuevos guardias suizos En el patio de San Dámaso del Palacio Apostólico.

Patio de San Dámaso del Palacio Apostólico

Un juramento que ha sido precedido en la mañana por una misa celebrada por el Secretario de Estado, el Cardenal Pietro Parolin, en la Basílica de San Pedro y por una audiencia con el Papa Francisco.

Francisco a los Guardias Suizos: sean signo de la acogida de la Iglesia

Al recibir en audiencia a los reclutas del Cuerpo pontificio, que juraron, el Papa destaca el especial servicio que prestarán, la devoción y la fidelidad a la Sede Apostólica.

Con sus antiguos uniformes que perfuman de historia, fidelidad y amor al Papa, la Guardia Suiza sigue ofreciendo hoy un precioso servicio hecho de devoción y espiritualidad. Es un tiempo, explica el Papa a los nuevos reclutas recibidos en el Vaticano, para comprender también la vocación de vida. Francisco, al reunirse con ellos antes del juramento de la tarde, destaca la «cortesía y disponibilidad» que muestran a quienes se acercan a ellos con una petición, una pregunta o un simple saludo.

Concluyó el Santo Padre de que el deseo de que las «fructíferas experiencias espirituales y humanas tanto en el Vaticano como en la ciudad de Roma» sean una oportunidad para profundizar en la fe y hacer crecer «un amor aún más fuerte por la Iglesia».

Fuente: Vatican News

El capellán, que es el director espiritual de la Guardia Suiza dirigió algunas palabras significantes a las personas presentes.

El capellán: la importancia del testimonio

Subrayó en su discurso cómo la misión de la Guardia Suiza está profundamente entrelazada con la fe: «El acto de prestar el juramento, no es una simple fórmula vacía que hay que repetir, porque se toma a Dios mismo como testigo. El juramento, por tanto, es en sí mismo un acto de veneración a Dios». En una sociedad en la que Dios y su Palabra corren el riesgo de ser olvidados, el sacerdote recuerda a los nuevos guardias suizos que es también gracias al testimonio de fe que dan, en este tiempo de pandemia que obliga necesariamente a preguntarse qué es lo que realmente cuenta en la vida, «que el hombre moderno puede ser devuelto a Dios una vez más».

Fuente Vatican News

También el comandante Christoph Graf habló ante la audiencia presente:

Comandante Graf: firme confianza en Dios

El ejemplo de San José, que parece ser un hombre no de muchas palabras sino de escucha, acción e integridad, «que, a pesar de todo temor y toda duda, hizo con valor y total confianza en Dios todo lo que se le pedía», es recordado por el comandante Coronel Graf en su discurso que también recuerda la Carta Apostólica Patris corde, con la que el Papa Francisco proclamó un año dedicado a San José. «Inspirémonos cada día en San José y hagamos nuestras esas cualidades, pero sobre todo su firme confianza en Dios», subraya.

Fuente Vatican News

En el siguiente enlace se puede apreciar algunos momentos significativos del día del juramento del pasado 6 de mayo 2021 realizados por “Vatican News”.

Fuente Vatican News

Quiero concluir con el lema de la Guardia Suiza que es:

“ACRITER ET FIDELITER” 

“VALIENTE Y LEAL”

O como decimos nosotros: “Si una vez eres guardia, siempre eres guardia”.

Autor: Peter Schumacher, CPP®

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