La Alta Dirección y el Gerente de Seguridad y Salud en el Trabajo suelen no estar en la misma sintonía: Dirección hace como que escucha los argumentos del Gerente de Seguridad cuando defiende la necesidad de mejoras en la planta, pero este Gerente suele defender su causa con una visión unilateral del problema.
Cualquier Gerente de Seguridad que crea que la eliminación de los riesgos en el lugar de trabajo es una meta indiscutible es un INGENUO: en el mundo real, debemos escoger entre:
- Riesgos físicamente imposibles de corregir.
- Riesgos físicamente posibles, pero económicamente imposibles de corregir.
- Riesgos económica y físicamente corregibles.
Hasta que el Gerente de Seguridad se haga a la idea de esta realidad, no puede esperar la aprobación de la Dirección General. Podría parecer que algunos Gerentes se han enfrentado a esta situación, pero en el fondo resienten la actitud de los Directivos, que no respaldan de buena gana sus esfuerzos de eliminar todos los riesgos en el lugar de trabajo. Pero “ESTE RESENTIMIENTO ES INJUSTIFICADO, YA QUE PRETENDER ELIMINAR TODOS LOS PELIGROS ES UNA ESTRATEGIA POCO REALISTA E INGENUA” (C. Ray Asfahl. Seguridad Industrial y Salud. Pearson).
Por: Ing. Marco Antonio Mercado Valenzuela (Pulse AQUÍ para leer su semblanza)